conoZe.com » Baúl de autor » Mariano Martín Castagneto

Para unos buenos amigos, en un buen momento

Querido amigo

Se acerca el día de vuestra boda y, desde este pequeño rinconcito virtual, vuestros amigos queremos felicitaros de la mejor manera que sabemos. Aceptar estos presentes con todo nuestro cariño.

Una historia para ti, E.:

Esa mañana llevaba mi vieja chaqueta para estar por casa. Hace años que la compre. Está vieja y con el tiempo se ha ido quedando sin pelo, pero le tengo un cariño especial.

Con el paso de los años se ha ido acoplando a mi modo de vivir y de ser de una forma mágica. Cuando me la pongo me siento tan a gusto.

¿No te pasa que hay una prenda de vestir en tu armario que no sabes la razón pero la cuidas como si fuera de alta costura?

Sigues a pie juntillas las normas correctas de lavado que te aconsejaron cuando la compraste. Además, ya conoces sus trucos para que este en excelente grado de calidad. Se lava con el jabón adecuado, se pone un poco de suavizante, cada día se le quitan las bolitas de la lana que se hacen con el roce, se tiende con esmero,...en fin, que la tratas con tanto cuidado para que no se estropee que parece que es la mejor que tienes.

Muchos me sugieren que la cambie, que esta apelmazada con los años, que siempre es la misma, que hoy en el mercado hay unas estupendas y mucho mas divertidas.,...Pero, no. No pienso tirarla. Esta chaqueta es la mía.

Pues bien, pensaba que la felicidad duradera es la que nos trabajamos día a día, la que cuidamos con esmero como a esa vieja chaqueta. ¿Cómo?

Es muy sencillo si seguimos la más importante de las normas de uso y cuidado que nos señalan al casarnos: un poco de esfuerzo diario y continuo de «querer querer» a la persona que hemos elegido para el resto de nuestra vida, con sus virtudes y con sus defectos, cuidando los detalles pequeños y quitando con ternura y respeto las bolitas de lana que se hacen con el roce.

Así, como la chaqueta vieja, nos iremos adaptando y la convertiremos en la prenda más importante del armario.

Una receta para ti, M.:

¿Qué ingredientes necesitamos poner en juego para preparar el exquisito «Éxito en el matrimonio»? ¿Para mantenerlo vivo y fortalecerlo durante toda la vida sin dejarlo a la improvisación, al destino, ni a la suerte?

Aquí tienes la receta:

Mezclamos en un bol los siguientes ingredientes y le damos vueltas hasta que la masa esté afianzada:

  • Un poco de esfuerzo diario y continuo de «querer querer» a la persona que hemos elegido para pasar el resto de nuestra vida.
  • Querer a la persona, con sus virtudes y con sus defectos e intentar adaptarnos al otro.
  • Cuidar los detalles pequeños que hacen que tu pareja sienta que es la persona más importante para ti.
  • Aprender a pelearse sin faltarse nunca el respeto
  • No hablar nunca de las relaciones sexuales de forma grosera y vulgar.

Regarlo con el mejor caldo, el sentido del humor. Añadir tu toque personal. Y ya tienes el plato listo para servir.

Un consejo lleno de sentido del humor pero que no se os puede olvidar NUNCA:

«Dichoso el marido de una mujer buena: se doblarán los años de su vida. La mujer hacendosa hace prosperar al marido, él cumplirá sus días en paz. Mujer buena es buen partido que recibe el que teme al Señor: sea rico o pobre, estará contento y tendrá cara alegre en toda sazón. Mujer hermosa deleita al marido; mujer prudente lo robustece; mujer discreta es don del Señor: no se paga un ánimo instruido; mujer modesta duplica su encanto: no hay belleza que pague un ánimo casto. El sol brilla en el cielo del Señor, la mujer bella, en su casa bien arreglada». Lectura del libro del Eclesiástico: 26, 1- 4, 16 - 21

Ahora en...

About Us (Quienes somos) | Contacta con nosotros | Site Map | RSS | Buscar | Privacidad | Blogs | Access Keys
última actualización del documento http://www.conoze.com/doc.php?doc=7676 el 2007-11-08 21:59:27