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Vitaminas para el verano: solución para sobrevivir

No quejarse del calor, aguantar este horno atmosférico con el que nos castiga el cambio climático y valorar lo positivo de unos días de descanso o de cambio de ocupación: estos pueden ser los elementos fundamentales o los ingredientes esenciales de las vitaminas que necesitamos en este tórrido verano y así superar lo superable y no perder el buen humor. A este tipo de vitaminas veraniegas podemos definirlas como "cargar pilas en la familia" o "pensar en los demás porque hay "demás peores" que uno mismo" o " buscar el descanso que impida volver al trabajo con síndrome post-vacacional". Si pasamos de ellas, seremos menos felices y menos libres.

¿Y en qué consiste apuntarse a estas "vitaminas de supervivencia"?; quizá nos venga bien reflexionar sobre otro ingrediente de la guerra contra el calor, llamado "aire acondicionado". Para vivir sin calor excesivo controlamos la temperatura ambiente y climatizamos nuestro espacio vital y eso lo hacemos porque preferimos no sudar y no tener que recurrir a un abanico. Eso es bueno, lícito y saludable: estos mismos efectos pueden producirlos o incluso provocarlos, un clima familiar agradable en el que todos sus componentes se quieran, se comuniquen y aprendan a compartir juntos lo bueno y lo menos bueno, e incluso lo malo. Poner aire acondicionado a la esfera familiar significa valorar a las personas por lo que son,- hijos de Dios y hechos a su imagen y semejanza-, y superar así " el cómo son" porque en ocasiones nos equivocamos en nuestra visión personal y queremos hacerles según nuestro criterio aparentemente razonable. El aire es necesario para respirar - en la familia, equivale a la libertad de expresión, de elección, de comunicación, y de búsqueda de la propia identidad -, y se acondiciona a la mejor temperatura cuando cada uno se siente a gusto, se manifiesta como es, se siente en zapatillas y sólo está pendiente de ayudar a los otros en lo que necesiten; es decir, es el aire que enseña a salir de uno mismo, ocuparse de los demás, y ser de verdad solidario.

¿Es utópico éste panorama?, ¿pertenece a la psicología-ficción?, ¿es un futurible con fecha de caducidad conocida?. Dependerá de las mujeres y de los hombres de hoy y de mañana. La familia es una auténtica Verdad, los que somos partidarios veremos esta realidad hecha vida y con perspectivas optimistas ... los que no, pueden seguir en sus trece, pero les aconsejo que modifiquen su opinión cuánto antes, porque es mucho lo que se pierden.